Soy una llorona irremediable. Lloro viendo películas. Lloro con series, con documentales, con anuncios, con canciones y, cómo no, con libros. Hoy os he seleccionado los libros que más me han hecho llorar.
¡¡¡Atención!!!! Esta lista puede contener pequeños spoilers sobre los libros. Nada que vaya a destrozaros el libro, pero sí revelaros pequeños detalles de las tramas.
1 - Sinsajo de Suzanne Collins
Dos muertes tienen la culpa de las (2) lloreras que me pegué con ese libro.
2 - Leal de Veronica Roth
Curiosamente y a pesar de que me comí el spoiler del siglo con este libro (¡Gracias, Instagram!), no pude evitar llorar en el gran momento. Mis más sinceros aplausos para Veronica Roth.
3 - Posdata: Te Amo de Cecelia Ahern
Este fue un libro que me costó un poco leer, porque lloré mucho bastante. El libro trata de una mujer que queda viuda. Su marido, antes de morir, le escribe una serie de cartas que ella va leyendo mes a mes y gracias a ellas va superando su pérdida. Como podéis imaginaros, lloré con cada una de las cartas. Con todas. Pero la última fue la que más me hizo llorar. Ahora que lo pienso, me gustaría hacer una relectura de este libro...
4 - El cuaderno de Noah de Nicholas Sparks
Con este libro descubrís, definitivamente, que soy una ñoña.
5 - Desde Mi Cielo de Alice Sebold
Leí este libro hace muchos años, por lo que no recuerdo con claridad en qué parte me emocioné, pero sí recuerdo tener que parar de leer porque las lágrimas me impedían ver el texto. #problemasdelectores
6 - La Mujer del viajero en el tiempo de Adrey Niffenegger
Una de las historias de amor más originales y bonitas que he leído nunca. El libro en general no es muy triste, pero hay un par de escenas con las que no pude contenerme.
7 - Bajo la Misma Estrella de John Green
No creo que haga falta hablar mucho sobre los motivos por los que lloré con este libro. Los motivos pueden resumirse en dos palabras: John - Green.
8 - Entre Tonos de Gris de Ruta Sepetys
He hecho un poco de trampas con este libro, porque, en realidad, no lloré leyéndolo. Fue más bien una congoja interior. De esas que se te quedan en el pecho, como un nudo, y a las que les cuesta salir. Podríamos decir que fue una llorera sin lágrimas.
¿Cuál ha sido el libro que más os ha hecho llorar a vosotros?
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